jueves, 10 de julio de 2008

Ya no hay amor


CUERPO VACÍO

Ya no hay amor
en la pared
ni en las puertas de madera
ya no hay paredes ni puertas
de madera
ni ventanas
ni sillas
ni poltronas
ocupados por el mismo
esqueleto de hace siglos
ya no hay naranjas en la mesa
ni mesa ni naranjas
ya no hay nadie
en la cocina
nadie en el comedor
nadie en el baño
ya ni siquiera circula
ese animal de turquesa
cuya única misión era observar
la caída de una estrella
a través de una pared muy gruesa
ya no hay fuego ni ceniza
ni basura ni escoba
ni periódicos viejos
ni periódicos nuevos
ni camisa ni zapatos
ni mujeres ni amigos
ni dentaduras ni labios
para pronunciar de nuevo
estas mismas palabras
estas mismas palabras

Roma, 1957
Jorge Eduardo Eielson








Lo que hace que yo pruebe un gran dolor es que poseo un cuerpo. Si no tuviera cuerpo ¿qué dolor podría yo probar? Lao Tse







CUERPO TRANSPARENTE

Completamente azul y despeinado
El corazón y la cabeza entre las nubes
Heme sin mejilla y sin mirada
Con un rayo de luna en el bolsillo
Para vivir
Uso una máscara de carne y hueso
Un cigarro y luego una sonrisa
O primero una sonrisa y luego un cigarrillo
Posiblemente encendido
Visto saco y pantalón planchado
Frecuento hoteles amarillos
Nadie me espera ni me conoce ni me mira
Mi cuerpo en humo materia indiferente
Que brilla brilla brilla
Y nunca es nada.








FIRMANENTO

No escribo nada
Que no esté escrito en el cielo
La noche entera palpita
De incandescentes palabras
Llamadas estrellas








Mutantis mutandis

Escribo algo
Algo todavía
Algo más aún
Añado palabras pájaros
Hojas secas viento
Borro palabras nuevamente
Borro pájaros hojas secas viento
Escribo algo todavía
Vuelvo a añadir palabras
Palabras otra vez
Palabras aún
Además pájaros hojas secas viento
Borro palabras nuevamente
Borro pájaros hojas secas viento
Borro todo por fin
No escribo nada.

Jorge Eduardo Eielson


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