miércoles, 19 de octubre de 2011

XXI CONCURSO NACIONAL DE ARTISTAS JÓVENES



El Presidente del Centro Cultural Peruano Norteamericano y el Presidente de Sociedad Minera Cerro Verde S.A.A., Invita a usted a la ceremonia de premiación e inauguración del XXI Concurso Nacional de Artistas Jóvenes en las instalaciones del Museo de Arte Contemporáneo Arequipa.

Juan Manuel García Calderón Barreda y Bruce K. Clements, agradecen su gentil asistencia.

viernes 21
7:30 pm.

Arequipa, octubre 2011

lunes, 10 de octubre de 2011

CASUALIDAD POÉTICA


¿Pero un acontecimiento no es tanto más significativo y privilegiado cuantas más casualidades sean necesarias para producirlo?

Sólo la casualidad puede aparecer ante nosotros como un mensaje. Lo que ocurre necesariamente, lo esperado, lo que se repite todos los días, es muda. Sólo la casualidad nos habla. Tratamos de leer en ella como leen las gitanas las figuras formadas por el poso del café en el fondo de la taza - Una década de casualidades poéticas = M.A.P.

viernes, 7 de octubre de 2011

VIVIENDO EN LAS PALABRAS...



COLECCIÓN PRIVADA DE ADINA MIRANDA.

"Siempre me he preocupado mucho de la construcción plástica y no sólo de las asociaciones poéticas. Esto es lo que me distinguía de los surrealistas". André Breton

EN EL CAMINO DE SAN ROMANO


La poesía se hace en un lecho como el amor
Sus sábanas revueltas son la aurora de las cosas
La poesía se hace en los bosques

Tiene el espacio que necesita
No éste sino aquel que condicionan

El ojo del milano
El rocío sobre una flor de cola de caballo
El recuerdo de una botella de Traminer empañada sobre una bandeja de
[plata
Una alta verga de turmalina en el mar
Y el camino de la mental aventura
Que asciende a pico
Una parada se llena de maleza en seguida

Eso no se grita sobre los tejados
No es conveniente dejar la puerta abierta
O llamar a testigos

Los bancos de pescado los setos llenos de pájaros
Los raíles a la entrada de una gran estación
Los reflejos de las orillas de un río
Los surcos en el pan
Las burbujas del arroyo
Los días del calendario
El corazoncillo

El acto del amor y el acto de poesía
Son incompatibles
Con la lectura del diario en voz alta

El sentido del rayo de sol
El resplandor azul que despiden los hachazos del leñador
El hilo de la cometa en forma de corazón o de garlito
El latido rítmico de la cola de los castores
La velocidad del relámpago
La lluvia de peladillas desde lo alto de las viejas escaleras
El alud

La cámara de los prestigios
No señores no es la octava sala
Ni los vapores del dormitorio un domingo por la noche

Las figuras de baile realizadas en transparencia por encima de las charcas
La delimitación contra un muro de un cuerpo de mujer al que se lanzan
[cuchillos
Las volutas pálidas del humo
Los bucles de tu cabello
La curva de la esponja de las Filipinas
Los lazos de la serpiente de coral
La presencia de la hiedra entre las ruinas
La poesía tiene todo el tiempo por delante

El abrazo poético como el abrazo carnal
Mientras dura
Prohíbe toda escapada sobre la miseria del mundo.

Poemas, 1948. Traducción de Manuel Álvarez Ortega.

jueves, 6 de octubre de 2011

80 AÑOS DEL GRUPO MICHELL



* [ Nota de pie de página ]: Solo más tarde comprendí que los materiales que yo necesitaba para ese añorado texto no eran las palabras. Es decir, no eran los personajes (aunque ellos deberían regresar más tarde, reducidos a simples vestidos), ni los sentimientos ni las circunstancias que los que los movían, sino simplemente los colores, el espacio, las texturas. Pero, sobre todo, el espacio, puesto que era el espacio – el elemento más sutil del paisaje – el que rodeaba, en un estéril abrazo, la ciudad en que nací. Paraíso e infierno, pero única grandeza permitida a los limeños, era también su dimensión más secreta, era el silencio de las dunas al atardecer, eran los juegos de la sombra y de la luz sobre el territorio amado. Era la arena del desierto. Era el desierto a secas. O, en su defecto, un pedazo del mismo. Un fragmento de territorio. Una sucesión de fragmentos. Una infinita cadena de fragmentos de mi memoria, convertida en << materia pictórica>>, que conformarían ese paisaje virtual que las palabras nunca podrían devolverme. […] Por todas estas razones decidí rescatar, con la sola ayuda de mi memoria, toda la extensión costeña, fragmento por fragmento, y ellos a lo largo de toda mi existencia, no importa cuál fuera el desarrollo paralelo de mis demás actividades. A esta virtual epopeya – que culminará tan solo con mi propia desaparición – la he dominado el “ Paisaje infinito de la costa del Perú” ( Eielson, 1988 ).